Ahora que se perfila que Biden se erigira como ganador en las proximas elecciones presidenciales en Estados Unidos (yo todavia no estoy tan convencido), es propicio analizar lo que éste ha anunciado de cuál sera su postura internacional en múltiples declaraciones, y compararlas a las del actual presidente Trump. Con esto sigo en parte los lineamientos trazados por el Council of Foreign Relations (Consejo de Relaciones Internacionales). Primero, en lo que se refiere al cambio climático. Trump ha retirado a su país de los Acuerdos de París, y ha incrementado la produccion de combustibles fósiles. Biden, en cambio, resalta que el cambio climático es “la amenaza mas grande para Estados Unidos”, y llama a una “revolución” para hacerle frente.
En cuanto a combatir el terrorismo, Trump se ha inclinado a mas vigilancia doméstica, limitar la inmigración, etc. Biden, a su vez, propone el uso de fuerzas especiales y un agresivo ataque aéreo a los núcleos terroristas. Vale la pena mencionar que Trump ha impulsado un mayor gasto en la capacidad defensiva de su país. Biden, por su lado, promote un mayor uso de la diplomacia y recurrir a los aliados tradicionales de Estados Unidos. Recordemos que Trump recuerda insistentemente su doctrina de “America First” y hasta ha vilipendiado a los aliados de Estados Unidos. Biden, por otro lado, afirma que éste ha llevado “a la bancarrota la palabra de Estados Unidos en el mundo”.
En cuanto a las relaciones con China y Rusia, Biden, siento, no ha sido muy claro en su postura. Mientras que con esta última potencia, Trump se ha mostrado a veces conciliador, contradiciendo muchas veces a sus principales consejeros, no podemos decir lo mismo de sus repetidas confrontaciones con el país asiático. Ha impuesto tarifas a sus productos; lo ha acusado del robo de propiedad intelecual, manipulación de su moneda, subsidios injustos a sus exportaciones y hasta de espionaje económico. Anteriormente, Washington propició la entrada de China a la Organizacion Mundial de Comercio, tal vez para contenerla, pero mediante el uso de alianzas la excluyó del TPP (la Sociedad Transpacífica).
En cuanto al Medio Oriente, creo que la admistración Biden, como antes lo hiciera Obama, va ha adoptar una posición mas balanceada, mermando en parte el apoyo unilateral e irrestricto de Trump a Israel, Arabia Saudita y Egipto. Sin embargo, y como lo ha declarado, no cerrará la embajada de Estados Unidos en Jerusalem. Asimismo, imitando a su mentor Obama, tratará de fomenter un nuevo acuerdo nuclear con Irán.
Tradicional e históricamente, las administraciones demócratas han sido mas benignas y respetuosas en sus relaciones con los países latinoamericanos. Podemos recordar a los presidentes Kennedy y su Alianza para el Progreso, Carter y los acuerdos canaleros que , dicho sea de paso, una administración republicana jamás refrendaría, etc. Mientras Trump ha sido implacable con el régimen de Maduro en Venezuela, y ha reducido considerablemente el acercamiento con Cuba que, evoquemos, la administración Obama iniciara, Biden acusa a Trump de hacer uso de “una bola de demolición a los lazos hemisféricos”.
A grandes rasgos y haciendo la salvedad que estas son solo predicciones, se pueden perfilar algunos de los lineamientos que seguiría una posible administración Biden. Pero, muchas veces, las realidades y circunstancias geopolíticas que se imponen, dan al traste con la mejor de las intenciones.
EZRA HOMSANY
31 DE OCTUBRE 2020